Ya estábamos, casi un año, sin disfrutar de los apoteósicos conciertos de Obús, así que cogimos con ganas esta  oportunidad que las tierras murcianas nos brindaban. Tras el monumental derroche de Fortu y compañía del pasado año, cerrando con broche de oro el Leyendas,  no podíamos dejar de asistir, especialmente, si valoramos que, por ciertas “desavenencias”, este año  iban a fallar en la edición de 2014 (imperdonable, no será lo mismo sin Obús…y aprovecho para decir que, sin Medina Azahara, tampoco será lo mismo el primer día).  

            El lugar, el Parque Fofo, y el motivo la final Pop-rock murciana de  2014, en la que actuaba como grupo invitado. Por cierto, organizado por Sufriendo & Gozando (los mismos con los que no han cerrado para este Leyendas) ,  con la generosa contribución de Excmo. Ayto. de Murcia. A priori, la presencia de los grupos murcianos  y lo económico de la entrada (5€) hacía prever una  más que interesante entrada.  

            Sobre las 23,00 horas, accedimos al recinto, encontrándonos con la primera sorpresa: apenas había un tercio de la afluencia que se congregó, hace unas semanas para ver a Rosendo en el mismo lugar. Pues nada, mejor para disfrutar más cerca de los músicos y perder menos tiempo  en el meódromo.  

            Tras la entrega de premios a los grupos finalistas de la región, poco tiempo para ultimar y, a las 23:23horas, comienza la archiconocida intro pregrabada de Morricone “Once upon a time in the West”, para enlazar con los primeros acordes de “Corre mamón”, a la par que los músicos aparecían a través del telón, situado en la parte inferior de la elevada plataforma sobre la que se situaba Carlos Mirat y su batería: Apoteósica aparición celebrada con efusividad por el público presente.  

            Continuaron en la misma línea regular con “Más que un Dios”, con buen sonido que pudimos disfrutar, cerca del escenario, sin excesivas dificultades, hasta que llegó “La raya” que elevó la participación y saltos de un público que se volcó coreando y bailando a lo bruto, especialmente entre la peña más joven, de los cuales muchos  habían nacido después de la creación de este tema.  Con el personal calentito y deseoso de gozar los clásicos, nos vimos Inmersos en la mejor fase del concierto, cayendo  la canción de “amor”  “Necesito más”, la trepidante “El que más” (me encanta, acojonante que disfrutamos a lo grande)  o la reformada “Juego sucio”  y su magistral puesta en escena, apoyada por la base rítmica contundente que caracteriza al sonido Obús del siglo XXI (Dios, ahora sí que nos habíamos metido en la descarga, perro faldero ignorante!!), finalizando con la siempre bien recibida “Te visitará la muerte”  (Algo inevitable en este camino tortuoso y plagado de minas que es la vida y cuya densidad aumenta paralela al edad del caminante, así que ¡¡¡¡¡Carpe Diem!!! )  

            El cuarteto funcionaba a la perfección con Fortu correcto a la voz, acompañado de su fiel actitud chulesca, macarra y desafiante que constituyen su sello de  identidad.  Paco Laguna, “Su amigo y su hermano”,  es la otra pata fundamental de la mesa, sin él, no habría lugar para Obús, está como si tuviera 20 años en cuanto a energía y actitud, pero con la veteranía que le da su experiencia y buen hacer.  Carlos Mirat, no me cansaré de decirlo, es un máquina (Gracias por la baqueta!), preciso y contundente que ha logrado que Obús suene diferente y que nos hace disfrutar cuando observamos cómo se mueve en el escenario. El último integrante, Fernando,  es otra incorporación de lujo que encajó perfectamente desde su incorporación al grupo, se lo curra con sus posturas y su forma de tocar, dando una mayor vistosidad al grupo.  

            Aunque este año no van al Leyendas, hubo tiempo para que Fortu reclamara a Marcos Rubio su presencia en el escenario y “dorarle la píldora” por su labor en la organización de este tipo de eventos (Todo es válido si ello conlleva que vuelvan al Leyendas 2015 (Síiii!)  

            Llega el turno de “Complaciente o cruel” que, si bien la primera vez que presencié la  novedosa puesta en escena me resultó curiosa, he podido hacerme experto en la misma y creo que corta el rollo, le dedica mucho tiempo a elegir subir las chicas al escenario (esta vez subió a una docena) y llega a quedar tediosa y aburrida. En fin, por lo menos, esta vez, no hubo sofá y lo que realmente me quedó claro, es que es  una estupenda forma de destrozar la sensibilidad latente de esta genial canción de letra y música ¡Mil veces antes la versión del directo del 87!  

            Una vez acabada la penitencia, nos concentramos en volver a conectarnos con el popular clásico “Dinero”, que si bien no es de mis favoritas, tiene su tirón  la conoce todo el mundo y siempre triunfa. Ya cogido el ritmo, sí que tiramos con ganas del amigo en la fiesta que se convirtió el recinto con el  “Vamos muy bien”,  con la que, más de uno, se sentía identificado pensando en alguna noche de borrosos recuerdos  

            Tras un breve descanso en el que la mayoría de la concurrencia se limitó a que volvieran sin necesidad de aclamarlos, reaparecieron para tocar la imprescindible “Va a estallar el obús” que, como siempre, la prolongan, presentan al grupo, Fortu hace el pino (aunque ya no bebe whisky),  y Carlos se vuelve a marcar otro solo antológico de batería  bajando de la plataforma sin parar de tocar, hasta acabar en el centro del escenario con Fortu y Paco, arrodillados a su lado, golpeando el suelo con las maderas. Para rematar la faena, la festiva “Esta ronda la paga Obús” , puso el broche final a un concierto que estuvo bien, pero que no fue brillante.   

            El diseño del escenario, está muy logrado, pero son ya cuatro las veces que los he visto con la misma escenografía, haciendo las mismas cosas, carentes de sorpresas y, aunque sigo disfrutando, se echan de menos ciertos cambios, alguna sorpresa en el magistral solo de batería o, incluso, alguna variación, en el set list, que no sea la que  está noche tuvo con la reducción de  temas. El show duró exactamente 90 minutos, de los cuales 10 largíiiiiisimos se los llevó “Complaciente o cruel” y eché de menos temas como “Pesadilla nuclear”, “Solo lo hago en mi moto” o “Autopista” que hubieran mejorado, notablemente, la sensación final. Esperaremos a próximos eventos, ahora que entran en estudio,  para degustar una nueva escenografía y  un nuevo repertorio que seguro que merecerá la pena.  

            ¡Uno es lo que ha vivido! 

                                                                                                                       Bravo-Ceutí-

            Set List

• -          Corre mamón

• -          Más que un Dios

• -          La raya

• -          Necesito más

• -          El que más

• -          Juego sucio

• -          Te visitará la muerte

• -          Que te jodan

• -          Complaciente o cruel

• -          Dinero

• -          Vamos muy bien

            BIS

• -          Va a estallar el Obús

• -          Esta ronda la paga Obús