Se presentan como Juanes, por llevar la camisa negra (camiseta), y porque, según dicen, es el nombre de todos sus miembros. Bueno, al menos el batería sí creo que era sudamericano.

              La formación, de momento solamente instrumental, la conforman: el nombrado batería, que salvo alguna duda en una versión de Zeppelín , superó el envite con bastante soltura. El bajista, que tardó un poco en relajarse, pero que controla muy bien su instrumento. Y finalmente el guitarrista, que, a falta de vocalista, asumía el papel de solista, línea melódica y frontman. Lo mejor, la facilidad con la que se desenvolvía en las tres facetas.

              Nos hicieron pasar un rato más que agradable, en el que quisiera destacar la versión de “Back in Black” de AC/DC, el atrevimiento de Led Zeppelin (sin voces, claro) y el gran aporte de los G’N’R. Esperemos que cuando encuentren un vocalista, lo que éste aporte sea más bello que el silencio, porque si no, mejor están así.  

              Tras unos años actuando como banda de versiones (de Asfalto), bajo el parecido nombre de Asfalticca, esta banda se decidió a grabar canciones propias, viniendo a dar como resultado este ‘Mundo de Cristal’. No va a ser casualidad que muchos de los temas de este disco traten sobre similares a los de Asfalto, y que, en lo musical, el aspecto progresivo sea también tarjeta de identidad.  

              La ‘culpa’ de todo esto la tienen la calidad de los músicos. El buen hacer de Javier Canseco, al bajo, unido a la versatilidad de la voz de José, la maestría de Ismael a la guitarra, y la gran experiencia de Filthó al teclado; todo ello compactado con la contundencia de Joaquín Arellano, ‘el niño’, a la batería.  

              En el concierto sonaron, entre otras, mis tres preferidas, “Un mundo de cristal”, con su toque ecologista; la instrumental “Lamentos” y potente “Encerrado”, junto a otras como “Infierno”, dedicada al reportero José Couso, “Ahora toca recordar”, dedicada a los compañeros músicos. También tuvimos que ‘sufrir’ “Por verte sonreir”, no consigo pillarle la gracia a la melodía, aunque la parte rítmica y armónica si me gusta.  

              En cuanto a las versiones, nos prepararon dos. “La mardición de Kcor”, de Muro, participada en la composición por Joaquín Arellano, y cantada por este mismo, mientras aporrea la batería. “Siempre estás allí”, de Barón Rojo, con la que se me notó la querencia (la canté enterita, a grito pelao). Y también, por petición de alguien del público, ya que no estaba prevista, “La paz es verde” de los Asfalto, en una versión muy power.  

              Con todo esto, creo que su techo todavía está lejos. Espero su segundo álbum y, vuelta al ruedo, - a tocar para 10 o para 1000 -  

              De las difíciles, para el rock, tierras Toledo, nos llegó esta banda, que ha podido aprovechar, el pequeño tirón de ser la exbanda de Rafa Blas Carpena, ganador de la 1ª edición de La Voz, y que les dejó el legado de su último álbum, ‘Sin Retorno’ (¡qué nombre! ¿no?) , que Alberto Symon defiende con gran nivel. También tuvo, esporádicamente, la aportación en las guturales de César, el bajista, que pasaba a primera fila cada vez que se necesitaba su participación.

              El sonido de las guitarras de Roberto y Salvador fue muy bueno, como también la parte del teclado de Sellés, el cual me sorprendió como en su rincón, por momentos parecía volverse loco

              El público, algo más numeroso en la actuación de Nocturnia, estuvo bastante activo, devolviendo, en parte, la entrega de la banda. Coreamos, al menos todos los estribillos, hicimos palmas cuando nos lo pidieron, y, en general, agitamos nuestras ‘cabelleras’ al ritmo de su heavy metal.  

              Entre el repertorio, quisiera destacar la resultona “Final de los Tiempos”, el directo de “Arde el Sol”, la bonita letra de “Hermanos” y la reeditada “En busca del tiempo”