28-11-06 W.A.S.P. + JADED - Sevilla (Sala Q)

            Ver a unas leyendas como W.A.S.P. (o más concretamente a BLACKIE LAWLESS, que viene a ser igual), siempre es atractivo, sobre todo si como en mi caso era la primera vez. Sin embargo, os iré relatando cómo una noche esperada con ansias puede tornarse en una triste decepción. Adelanto que no es porque los músicos estuvieran mal o por el sonido, sino por otro tipo de "imponderables".

            El evento ya venía alocado desde su gestación. Se anunció inicialmente un cartel compuesto por JADED y W.A.S.P. para actuar en la Sala Q de Sevilla el día 27/11/06. Con posterioridad se informa que pasa al martes 28. Poco tiempo después se hace saber que el concierto pasa a la nueva sala NYA (donde tocó el mes pasado U.D.O. como podéis ver en mi crónica del 04-11-06). No contentos con este baile, al tiempo el espectáculo salta al pabellón deportivo de Camas y se a FATAL SMILE como tercera banda. Por último, como era de esperar, hubo otro cambio de sede que en este caso suponía regresar a la inicial Sala Q pero manteniendo el cartel de tres formaciones.

            A todo esto, se supone que el acto empezaba a las ocho... He aquí que cuando la cola era importante y la impaciencia se apoderaba del humor de los congregados, pasadas las nueve la organización cuelga un cartel pidiendo disculpas e informando que las puertas se abrirían a las diez "debido al retraso en la llegada de la banda". Superada esta hora el letrero se sustituye por otro que marca la entrada a las once y empieza a circular el rumor de que los teloneros "se caen" del espectáculo.

            Con el comprensible enfado de los asistentes, entramos poco después de las once, tres horas tarde, y finalmente vemos que actuarán sólo JADED y los esperados W.A.S.P.

            La primera decepción (el retraso) se refuerza por el hecho de que nadie de la organización salió a escena a explicar lo que había pasado o a pedir unas merecidas disculpas a los pacientes congregados.

JADED

            La segunda decepción para mí recae en la falta de respeto del grupo principal a su telonero. Las voluntariosas JADED salieron a un escenario en cuyo centro y en primera fila había "algo" (luego supimos lo que era) de dos metros de alto por más de uno de ancho oculto bajo una lona. El espacio para actuar ya era de por sí pequeño y daba cierta lástima ver tapada a la cantante JULIE, que continuamente tenía que agacharse por los lados para que le pudiéramos contemplar la cara y que a su vez comprobase que había público ante ellas. Lamentable, al menos según mi opinión.

            En cuanto a la música, ellas mismas se definen como "la banda de rock femenina más caliente" (suena a KISS, ¿verdad?). Realmente hacen un heavy rock ochentero que suena poco original pero convincente. La actitud de la banda es magnífica, de una total entrega, y en la escasa media hora de actuación se vuelcan en complacer al público, que les reconoce su valía. Comienzan con GET UP y el sonido es francamente mejorable, ya que está muy saturado y la voz de JULIE se oye regular. La bajista ABBEY mueve continuamente la cabeza al estilo del trasher TOM ARAYA y junto con la oculta batería HILLARY (la que más me gustó) aportan una base rítmica incansable. Finalmente, la guitarrista BRITT ofrece el lado más heavy del cuarteto, con unos afilados solos que desgraciadamente no se oían con nitidez. Del repertorio, para mí bastante desconocido, extraigo el citado tema, además de RING OF FIRE y la final TRAGIC.

            Resalto finalmente el detalle del botellín de Cruzcampo con el que la cantante se pasó la mitad del concierto. Observadlo en una de las fotos

W.A.S.P.

            Tras una lenta media hora de preparación y de comprobación de que todo estaba en regla (aunque luego se vio que la parte del guitarra DOUG BLAIR no funcionó como debía), a las doce y cuarto se oscureció el recinto para que aparecieran los deseados W.A.S.P. ante los fans. Tras la intro debida al clásico THE END de THE DOORS, el cincuentón BLACKIE y sus huestes comenzaron el show con la conocida ON YOUR KNEES de su disco debut del lejano ya 1984. A pesar de la extensa producción de la banda, el material de sus primeras obras llevó el peso de la noche, ya que disfrutamos de L.O.V.E. MACHINE, WILD CHILD, WIDOW MAKER - SLEEPING IN THE FIRE y la traca final de I WANNA BE SOMEBODY. Entre estos temas se intercalaron un par del disco THE CRIMSON IDOL y prácticamente nada nuevo.

            Como decíamos antes, el elemento misterioso del centro del escenario que tapaba a las buenas (en todos los sentidos) de JADED, resultó ser un espectacular micrófono-esqueleto-balancín del que apenas se separó en toda la noche el señor LAWLESS. Prácticamente aquí quedó la concesión al espectáculo visual, ya que nada de lo imaginado (calaveras con sangre, fuego, etc.) figuró por ningún lado.

            El sonido, como ya le había pasado a las teloneras, estaba demasiado alto y se solapaban los instrumentos. Esto tapó en más de una ocasión la mermada voz de BLACKIE, que por cierto fue mejorando con el paso de los temas hasta sonar realmente bien en la elaborada THE IDOL. El bajista MIKE DUDA estuvo en su línea y el que más problemas tuvo fue el atribulado guitarrista DOUG BLAIR, que se pasó bastante tiempo en SLEEPING IN THE FIRE fuera del escenario por problemas técnicos con su material. Para mi gusto, en un concierto tan breve (sólo 65 minutos) sobró el largo solo con el que la banda volvió para los bises. Por cierto, que más bien fue bis que bises, ya que tras BLIND IN TEXAS el grupo desapareció para no volver a pesar de los pitidos del respetable, que se sintió con el pelo tomado.

            Ésta fue lógicamente la tercera decepción, ya que los 25,50 euros de la entrada se merecen a mi entender un poco más por parte de los organizadores, de la banda o de quien sea. El caso es que mejor no hacer la cuenta del coste de cada minuto de actuación de W.A.S.P.

            A pesar de todo, enfriando los ánimos un poco, reconozco que el concierto estuvo bien si nos ceñimos únicamente a que vimos a un grupo mítico y que recordamos algunos de sus mejores temas. El caso es que esperábamos más formalidad y más material, como THE REAL ME, MEAN MAN o algo de sus últimas grabaciones.

            Larga vida al Rock n' Roll

JOSÉ MARÍA PINILLA